Mi primera semana en Kunming

Estándar

Hola a todos y todas. Por fin he podido sacar un ratito en esta primera e intensa semana de mi nueva vida aquí.

En mi corta estancia en Kunming he vivido tanto momentos difíciles como otros felices y maravillosos, digamos que esto está lleno de contrastes.

Mis dos primeros días aquí fueron bastante tristes. Nada me salía como yo quería.

Cuando por fin llegué al aeropuerto de Kunming a las 13.00 horas en China acabé cometiendo el primer error. Tras cambiar mi dinero me dirigí a la puerta de salida y una chica se me acercó preguntándome si necesitaba un taxi. Creí que quizás iba a ayudarme a encontrar uno pero simplemente trabajaba para su amigo que conducía un taxi, pero ilegal. Así que acabé llegando a mi universidad pagando un poco más de lo que debería. Creo que ya no me volverá a pasar.

El tipo me dejó justo en la puerta del “International Student Hotel”, que era supuestamente mi futura residencia en Kunming. Una habitación para dos personas parecida a la de cualquier hotel compartiendo baño con otras tres personas. Luego me dirigí al edificio en el que tenía que registrarme, hacer el examen de nivel y recoger los libros de mi futura clase. Tras hacer un examen HORRIBLE, ya que mi cansancio superaba límites insospechados, conocí a la primera gente que se encontraba en la misma situación que yo, así que me fui a comer a la cantina de la universidad con un húngaro que parecía muy buena gente.

Por la tarde noche acabamos juntándonos unos 10 extranjeros y tomé mi primera cena en un restaurante chino: pagué menos de 3 euros por hartarme de comer con cerveza incluida. Llegué pronto a mi habitación y cuando iba subiendo las escaleras del edificio vi un cartel que decía que al día siguiente a las 8 de la mañana teníamos que dejar la habitación y dirigirnos con todas nuestras cosas a la oficina de estudiantes extranjeros de mi universidad. Tras ducharme y acostarme, sobre las 23.00 llegó mi nueva compañera de habitación, una rusa llamada Alice y ella me confirmó que por la mañana teníamos que abandonar nuestra cómoda habitación.

Mi segundo día en Kunming fue bastante deprimente. Tras despertarme, coger mi maleta de unos 30 kilos, ordenador, etc. y bajar 6 pisos con todo ello a las 8.00 me dirigí a la recepción del “hotel” y nadie me entendía. Allí fue exactamente donde me di cuenta de que no tengo ni idea de chino. Ni comprendo ni me comprenden. Tenía que abandonar la habitación y a las 8.30 tenía mi primera clase en el segundo nivel de principiantes. Creí que era más importante ir a clase así que dejé la mudanza por la tarde y fui a clase (aunque media hora tarde).

Era jueves, el peor día de la semana para mi nivel ya que tenemos unas 5 horas de clase de chino. En clase sólo podía pensar en que me cambiaban de habitación a algo que parecía no estar en iguales o mejores condiciones que mi anterior habitación. Efectivamente fue así. Por la tarde conocí a una chica italiana que hablaba español y me llevó a mi nuevo edificio, es decir, donde alojaban a los extranjeros en la universidad pero no quedaba sitio, así que acabé en la residencia de los chinos.

Subí a la cuarta planta y entré en una habitación con cuatro literas habitada para tres chicas más. No hay WC (sólo agujero en el suelo), no hay espejo y la limpieza deja mucho que desear. Más tarde hablé con la chica suiza y me dijo que ella no aguantaba en la nueva residencia por lo que me dio la llave de su habitación y ella no compartía con nadie, así que por el momento estaba sola.

Por la noche no pude ir a cenar porque no tenía dinero y mi tarjeta de crédito nueva no funcionaba en los cajeros chinos así que volví a la habitación muy triste pensando que quizá podía arreglar lo del dinero al día siguiente.

Mi gozo en un pozo. El viernes por la mañana un nuevo problema. Tras levantarme e ir al banco a cambiar los 70 euros que me quedaban, pruebo en tres cajeros diferentes y la tarjeta no funciona. Llamo por teléfono a mi banco y luego a mi padre y parece que no me lo pueden arreglar hasta que no me hagan una nueva tarjeta que después mis padres tendrán que enviarme aquí. Otra decepción.

Finalmente todo se soluciona y afortunadamente tenía otra tarjeta que puedo utilizar por el momento (aunque me cobre comisión). Ese mismo día conocí a Gabriela, una chica argentina con la que estoy todos los días. Ahora vivo en la habitación de la suiza porque una chica tailandesa que estaba en mi verdadera habitación me cambió la llave para estar con su amiga. Estar en el edificio de los chinos tiene sus desventajas y aquí cada cosa que consigues se hace pasito a pasito. En primer lugar nos cierran las puertas a las 23.00 y además descubrimos ayer que no se puede utilizar ningún aparato que caliente porque no hay suficiente corriente y se va la luz si quieres calentar agua o secarte el pelo. El edificio de los extranjeros es igual pero no tiene horario, funcionan todo tipo de aparatos y no hacen inspecciones en los dormitorios

Poco a poco me voy acostumbrando a todo. Gabriela casi vive conmigo porque yo estoy sola y ella no se encuentra a gusto con su compi. La habitación la estamos acondicionando para las dos y cada vez es más habitable. Cada día conozco a más gente y hacemos más cosas juntos.

No soy capaz de contaros cómo es todo esto, hay que venir para verlo. China es otro mundo. Al principio cuesta mucho acostumbrarse a todo: la comida, el tráfico caótico, la gente, el idioma…pero tengo que decir que cada día estoy más contenta de estar aquí.

Somos muchos extranjeros y nos apoyamos en todo lo que podemos, sobre todo Gabriela y yo. He ido a bailar con los chinos a los parques, he paseado por los alrededores de la universidad y hasta he ido al cine aquí.

El tiempo es maravilloso, realmente es la ciudad de la primavera y todo es muy grande, aunque aún me queda mucho por conocer. Quizás las cosas que me han llamado más la atención en esta primera semana son el tráfico caótico (aquí los pasos de peatones no sirven de nada), la poca limpieza que se le da a los establecimientos y la falta de WC por donde quiera que vaya (creo que es a lo que más me cuesta acostumbrarme). Poco a poco estas cosas ya no me llaman tanto la atención, voy haciéndome a ellas y descubriendo otras nuevas.

La gente aquí me gusta. Suelen ser personas abiertas y les llamamos la atención muchísimo los extranjeros así que mucha gente quiere hablar con nosotros. Es sorprenderte lo que nos miran por la calle.

Las clases muy bien, estoy en el nivel adecuado. Trabajamos mucho en clase y tenemos muchos deberes que hacer pero creo que voy a aprender mucho. Tengo clase 4 días a la semana con tres profesoras diferentes y todos los viernes, sábados y domingos libres. Además, este lunes no hay clase y lo vamos a aprovechar para conocer un poco la ciudad y relajarnos algo, aunque no nos podemos dormir en los laureles porque todos los días hay que estudiar y hacer ejercicios en casa.

Me podría tirar horas escribiendo sobre mi breve estancia aquí. Todo es nuevo y a la vez extraño para mí, pero creo que por hoy es bastante.

Ahora no tengo internet y vengo a una cafetería con wifi que hay al lado de la universidad así que he pensado pasarme 2 veces por semana por aquí, escribir un poquito y también hablar por Skype con quien esté conectado. No puedo utilizar facebook ni google aún, lo digo para quien no lo sepa y tampoco tengo cámara de fotos todavía, espero que dentro de unas semanas me ingresen dinero de la beca y buscar una baratita para también poder ir subiendo fotos.

Os recuerdo que acepto visitas y que aunque al principio todo haya sido un poco difícil estoy muy bien. Creo que mi experiencia aquí va a ser maravillosa. ¡Un beso a todos!

Un comentario »

  1. Todos esos tormentos y cambios y problemas vienen sólo al principio. Lo otro, la primavera de verdad, los chinos, lo alucinante, es lo que se va a llevar toda la intensidad y el protagonismo. Que eres muy fuerte y te vas a adaptar en nada, lo sé, igual que sé vas a exprimir aquello como sólo una Julia Rivers podría. Sigue contándonos. Y nos vemos por Skype :). Y un abrazo gigante.

    (¿Le digo que pase?)

  2. ¡Neni! ¡Yo también estoy en una cafetería para conectarme un rato! Esto de no tener Internet en la resi es lo peor… Todo lo que has contado nos ha pasado a todas, al menos a mí, más o menos igual. Esto es una locura, pero fijo que vamos a aprender un montón, ¡ya lo verás! Y el caos, la suciedad y otras cosas más parece ser común en toda China… xD. ¡Vamos a tener aventuras que contar por un tubo!

    ¡Un besazo! ¡Me ha hecho muchísima ilusión leerte! ¡Ánimo! ¡Te debo un buen correo! ¡Muakk! 😉

  3. Tía, m’ancantao el pos… pásatelo muy bien y aprende mucho chino y hazte a la cultura que es lo más importante. Tranquila, que lo malo se va y siempre se queda lo bueno. Un besazo

  4. Buah, siento mucho las cosas feas que puedan haber sucedido, pero estoy seguro de que cada día va compensando un poquito más. Sabes que envidio los cojonazos que tienes para dar el paso que has dado y te mando el poquito de fuerza que a mí me sobra (la búsqueda de piso me ha chupado bastante energía, aunque bien podría haberme chupado otra cosa…). Te mando un mail mañana con mis noticias de spaghetti. Muchos besos y espero verte pronto por skype!!!

  5. Ay señor. Cuánto entiendo tus palabras, mi querida julai. Fue inevitable recordar cómo me sentí cuando salí de Colombia para vivir fuera un año por primera vez. Sé que vivirás muchas cosas increíbles y espero no perderme ninguna. Chufi. Qué bonito que tú y Gabriela estéis compartiendo esta experiencia juntas. Bisousssss mi reina!!

  6. Te hemos leído desde Asturias en el PC de nuestra casera. ADELANTE. ?Vas a tener dinero suficiente para todo el mes? El miércoles estaremos en Graná y ya conectaremos contigo.Muuuuuuchos besos. Inma y Paco.

  7. Amore!! me alegra saber de ti!! piensa que todas las dificultades que pases ahora te irán haciendo más fuerte cada vez y, a la vuelta, te reirás de todo y solo te quedarás con lo bueno!!!
    Un besazo!!!

Deja un comentario